Por Horacio Campos
Recuerdo que, en la campaña presidencial con Beatriz Sánchez, a posterior de los resultados adversos y viviendo la
desilusión de las altas expectativas sobre el triunfo; en la reflexión que hacíamos entre algunos contertulios del
Movimiento Autonomista en el Frente Amplio (Movimiento donde militaba Boric y muchos del gobierno actual),
señalábamos:
“…MENOS MAL QUE NO GANAMOS, PORQUE HABRÍA SIDO UN TREMENDO PROBLEMA YA QUE DERECHAMENTE,
NO ESTAMOS PARA NADA PREPARADOS PARA GOBERNAR, SI NI SIQUIERA TENEMOS LAS PERSONAS IDONEAS Y
SUFICIENTES PARA COPAR LAS NECESIDADES DE UN GOBIERNO”.
No todos estuvieron de acuerdo con aquella reflexión, pero asumíamos que no estábamos preparados para tal
desafío. Hasta ese momento, podía sentir que lo que nos pesaba más, era la INGENUIDAD Y LA INEXPERIENCIA.
A posterior, luego de un largo proceso de discusiones internas, surgió la idea que había que ‘aglutinar” o “unificar”
algunos partidos y movimientos pequeños del FA, en un solo partido. Primero fue la sana idea, que no era lógico y
parecía absurdo, estar agrupados por separados entre grupos que supuestamente, nos unían los aspectos más
fundamentales del pensamiento político.
Al poco andar, luego de aprobar por mayoría el nombre de la nueva organización, seria bautizada como
Convergencia Social. Formé parte de quienes considerábamos que era un tremendo error construir otro nuevo
partido; considerando el rechazo de la gran mayoría de la ciudadanía a los partidos políticos por su desprestigio y
por sus actos de corrupción.
Ante la posibilidad y propuesta de levantar un gran Movimiento Social y Político, lamentablemente fuimos
derrotados ya que no congeniaba con las ideas electorales de quienes ya tenían en sus planes y mentes, las
próximas elecciones. “La Ley electoral no permitía a los Movimientos participar en las elecciones”; y la inscripción
de candidatos independientes, era mucho más “costosa y engorrosa”.
Así fue como en este proceso, fue apareciendo mágicamente la lucha interna de los distintos grupos por los cargos
en la dirección del nuevo partido. Quienes consideramos que este camino era incorrecto y podía llevarnos a una
derrota estratégica, en especial en los débiles vínculos con el vilipendiado “Movimiento Social”; decidimos
marginarnos.
Durante el proceso de reorganización y acumulación de fuerzas, fueron apareciendo signos extraños de conducción
y dirección política; donde la autonomía que se fue construyendo en el Movimiento Social, en especial a través de
las Asambleas Territoriales, que incluso lograron presencia nacional, y con un profundo y rico proceso de discusión
política para la idea de levantar una alternativa social y popular, con importantes grados de autonomía de los
Partidos Políticos, estos signos de “coaptación” de los partidos, se fue imponiendo y por consecuencia lógica, se
fue perdiendo la masividad y autonomía, cuestión que significo el alejamiento de miles de personas que se fueron
sintiendo una vez más, manipuladas por los mismos de siempre.
En este juego de lucha de poderes; que siempre ha existido en los partidos tradicionales históricos,
lamentablemente el FA y la nueva expresión orgánica de Convergencia Social, también decidió ingresar; ya que la
famosa frase que justifica muy bien dichas acciones se sigue escuchando hasta nuestros días: “TENEMOS QUE
ESTAR DENTRO PARA DESDE ALLI, CAMBIAR LAS COSAS”.
Durante todo este proceso, pude constatar la existencia de muchos compañeras y compañeros que mostraban su
inocencia, su ingenuidad y su inexperiencia política; donde veían a todo el mundo que actuaban con buenas
intenciones.
Otros aparecían con bastante inexperiencia y desconocimiento de cómo funcionaba la política; y aquí también; y
en casos emblemáticos, aparecía la falta de humildad para reconocer ese desconocimiento; y por consecuencia casi lógica, se instalaban las actitudes arrogantes de quienes pensaban que con su corta trayectoria política estudiantil; con toda la legitimidad que esa lucha pudiera haber tenido en el escenario político nacional, se creían que ya eran capaces de abordar parte del poder político como es un gobierno; no entendiendo ni aceptando en ningún minuto, que esa trayectoria de experiencia estudiantil, no era suficiente para comprender los problemas políticos de mayor profundidad; en especial, cuando había que enfrentarse a zorros que llevaban años haciendo lo mismo y se la sabían por libro y con mucha habilidad para manejar el poder.
Las estrellas se alinearon (para bien o para mal) y llegamos a lo que significó la elección de Gabriel Boric como
presidente.
Hoy ya en el gobierno; no se necesita ser tan analista para darse cuenta de que esas ingenuidades e inexperiencias;
al parecer le están pasando la cuenta. Tampoco es necesario ser muy erudito para comprobar que la arrogancia,
también está jugando como fuerza en contra para los avances y éxitos de gestión que todo gobierno requiere.
Al unir la ingenuidad, inexperiencia y arrogancia, no deja de ser posible; especialmente con el escenario político
partidista que vivimos hoy en nuestro país; donde existe una ultraderecha que lo único que quiere es golpear al
Partido Comunista y producir una fractura en las filas del gobierno. Para tal propósito, no dejan pasar ni el más
mínimo tropiezo ni error, por pequeño que sea y están invirtiendo una enorme cantidad de dinero en las redes
sociales para golpear minuto a minuto, al presidente y a cualquiera del gobierno. No es una locura pensar que
también existe otro enemigo.
Con una Derecha que supuestamente se denomina de “Centro”, pero que en alianza con sectores de la vieja
Concertación y en general, con todo aquel o aquella figura de la Clase Política Corrupta; donde se incluyen a los
propios aliados del Partido Socialista, PPD y otros; que teniendo como prioridad sacar partido de cualquier conflicto
que les signifique ganar alguna cuota de poder, por pequeña que esta sea, pensando siempre en las próximas
elecciones y en la necesidad de mantener sus privilegios como parlamentarios a cualquier costo. Todos estos y
estas no trepidan en golpear al gobierno cada vez que pueden; aprovechando más aún, los “errores no forzados”
que este comete. No es casualidad que todo el Senado, se alineara en sabotear y hoy día, denigrar al máximo a la
Convención Constitucional y el Proyecto anterior propuesto a la ciudadanía y que esta rechazara; ya que este; más
allá de sus defectos, planteaba suavemente la eliminación del Senado de la forma endiosada que se encuentra hoy
día.
Dicho lo anterior, no deja de ser posible la idea que exista hoy en el gobierno una fuerza (que no siendo de derecha)
que se esté encargando concienzudamente de llevar adelante acciones de SABOTAJE POLÍTICO al presidente y a
ministros y ministras. Revisemos algunas situaciones específicas:
El caso Izkia Siches
Su condición de mujer, tremendamente aguerrida, transparente, inteligente y Ministra del Interior.
Su independencia partidaria.
Alguien puede comprender, cómo una Ministra del Interior, decide ir a la zona más conflictiva de Chile por
las reivindicaciones originarias Mapuche; y lo hace en esas supuestas condiciones de inseguridad, de desinformación y con cero trabajos previos de inteligencia. Y si es que hubiera existido algún trabajo de apoyo operativo y de inteligencia para tal visita; lo hace con Carabineros, la misma fuerza que en pocos meses atrás, desde el presidente y muchos de los ministros y ministras en el actual gobierno, se enfrentaban en distintos escenarios exigiendo la renuncia y el encarcelamiento de muchos miembros de esa fuerza por violaciones a los DD.HH.
El remate con la Ministra del Interior, viene a posterior con una información que se le entrega sobre el
movimiento de unos inmigrantes y de un vuelo a Venezuela; donde por su ingenuidad e inexperiencia, no hace un chequeo propio de la información y esta resulta ser irreal y falsa.
La situación de los últimos días en relación con los indultos; ha rebasado todos los limites del sentido
común, donde los factores anteriormente mencionados como la ingenuidad y la inexperiencia pasan a
segundo plano y casi ya no merecen ser considerados. Los errores políticos cometidos en este escenario
pertenecen al grado de Kínder; y se supone, que nuestros jóvenes gobernantes por lo menos ya salieron
de la educación superior en la formación política, aunque su práctica profesional, aún esté en pleno
desarrollo y sin seguridad de su aprobación. Veamos y revisemos un proceso con mínimo sentido común,
entendiendo y aceptando que el indulto es una decisión política del presidente de la república; que puede
estar revestida de criterios humanitarios, políticos o cualquier otro.
▪ El presidente decide indultar. (Es su prerrogativa absoluta).
▪ Solicita una lista de acuerdo con ciertos criterios políticos. Se supone que pudiera haber
habido alguna discusión previa con los partidos políticos del gobierno.
▪ El Ministerio de Justicia en coordinación con fiscalías y Gendarmería, elabora dicha lista y
se le entrega al presidente.
▪ En dicho ministerio, se conforman las carpetas individuales con todos los antecedentes de
cada candidato a indulto.
▪ Se hace el estudio de cada uno de ellos o ellas.
▪ Se confrontan todos los aspectos legales y jurídicos correspondientes para ejercer el
indulto.
▪ La Ministro de Justicia teniendo todos los antecedentes revisados y confirmados, le pone
su rubrica para ser entregado al Jefe de Gabinete de la presidencia.
▪ El jefe de Gabinete, siendo el último filtro antes de llegar al presidente, se supone debe
revisar concienzudamente todos los documentos y su contenido, asegurando que no
existan fallas que a simple vista podrían provocar algún error político o jurídico que ponga
en riesgo la presidencia.
▪ El presidente, sobre la base que confía plenamente en sus asesores, ministros y ministras,
por la cantidad de trabajo que ejerce cotidianamente, no se da el trabajo de revisar dichos
documentos y simplemente los firma a ciegas y con confianza absoluta. (cuestión que
debería de haberlo hecho).
A posterior, el presidente enfrenta a los medios de comunicación sobre los motivos de su decisión de indultar; y
bajo un criterio absolutamente exento de cualquier asesoría jurídica adecuada para su intervención, olvida o
relativisa su acción como una prerrogativa absoluta del presidente y que puede o no puede tener carácter político;
y en forma absolutamente irresponsable, donde no cabe para su formación académica y su rango político, se le
ocurre dar a conocer una opinión personal sobre la judicialidad del caso del frentista Jorge Mateluna.
¿Qué ocurrió aquí en esta intervención del presidente?
¿Se manda solo y puede decir lo que se le parezca?
¿No existe una línea política del gobierno, donde participan más de una persona cada vez que el presidente va a
enfrentar a la prensa?; y, por ende, ¿a sus opositores?
Seria terrible mala noticia, que el narcisismo se apodero de La Moneda y ya no se requieren las opiniones colectivas,
más aún, cuando ciertas situaciones son extremadamente complicadas y sensibles.
Como corolario, la Ministra Vallejos, viniendo demostrando una tremenda capacidad y habilidad cada vez que los
medios (al servicio de quienes ya sabemos a qué intereses representan) han intentado tenderle las típicas trampas
de las “cuñas” para luego usarlas a diestra y siniestra; en esta oportunidad, justo cuando la situación de los indultos
ya se encontraba en máxima sensibilidad por los errores anteriores; en su intervención a la prensa, les señala y les
ratifica que dichos indultos fueron concebidos bajo ciertas “desprolijidades” y lo sella con la frase del año: “SI EL
PRESIDENTE HUBIERA TENIDO TODA LA INFORMACION ADECUADA, TAL VEZ LA SITUACION HABRIA SIDO DISTINTA”.
Esta ultima frase, fue un regalo de navidad, de año nuevo y de todos los cumpleaños para la Derecha y para toda la
Clase Política Corrupta que lo único que quieren; los primeros, lograr que el gobierno llegue a su máxima expresión
“de rodillas”, sin la necesidad de derrocarlo o sacar al presidente antes de tiempo, (aunque nada se puede asegurar
al 100%); y los segundos, hacer de cada error y de cada crisis del gobierno, un espacio para avanzar en la adquisición de mayor poder para sus partidos y para sus arcas corruptas. La Ultraderecha, la Derecha y toda la Clase Política Corrupta; hacen un festín hoy día con estos errores cometidos.
Todo lo anterior, hace pensar con fundamentos que todos los factores que hacen a este titular; están presentes,
pero que el SABOTAJE POLITICO INTERNO, se está haciendo cada día más notorio y con más frecuencia; y al parecer, la INGENUIDAD, LA INEXPERIENCIA Y LA ARROGANCIA, son hoy día los arboles que al presidente y a los gobernantes, no los dejan ver el bosque.